Gerenciando una obra… ¿Qué es BIM?

Cuando vamos a emprender un proyecto constructivo, procedemos a analizar la cantidad y diversidad de variables que intervendrán, de elementos a considerar, y comenzamos a valorar los recursos disponibles, particularmente los informáticos, de manera de sistematizar el análisis. El objetivo de este artículo, es sumarse a las voces que vienen llamando la atención sobre la necesidad de tomar conciencia de la importancia de incorporar en todos los proyectos esta nueva forma de trabajar. La misma ya se viene utilizando tanto en nuestro país como en múltiples lugares del mundo. Sin embargo para valorarlo apropiadamente, es necesario transmitir en forma sencilla y práctica el significado de BIM.

Para ello, arranquemos analizando las iniciales BIM. El significado de esta sigla es ”Building Information Modelling”, que se puede traducir como Modelado de Información de Construcción. De dicha traducción se desprenden dos componentes principales:

Componente de información: Al iniciar un proyecto de obra constructiva, tenemos todo tipo de información que tenemos que integrar en el diseño: fotografías, levantamientos topográficos, datos de tránsito, datos de tiempo, datos de costos, materiales, legislación local, etc.

Componente de modelado: Se toma la información de la obra constructiva y se carga dentro de un modelo matemático. El modelo convierte la información en un formato digital y relaciona las variables entre sí a partir de análisis matemáticos y estadísticos. De esta manera, el modelo, además de considerar la espacialidad del proyecto, incorpora otros elementos que sirven para el análisis completo de nuestra obra.

De la observación de los componentes se puede delinear que el BIM no es un producto ni un programa, es un proceso que se usa para integrar todo tipo de información del mundo real, digitalizarla y, mediante un análisis matemático, generar una serie de productos que permitirán llevar a cabo un proyecto constructivo. Rápidamente puede concluirse que no existe una solución universal que sea aplicable en absolutamente todos los proyectos por igual y que podamos simplemente “recetarle” a un cliente, sino que en cada proyecto tendremos que hacer un análisis de las necesidades y condiciones que hay, y planear cómo vamos a hacer ese proceso.

Muchas veces la gente se confunde porque escucha hablar de modelo BIM conduciendo hacia la creencia de que BIM es un software que permite generar un modelo tridimensional de una estructura, lo cual es un error. El modelo gráfico es uno de los productos que genera el BIM. De hecho, el proceso BIM se basa en objetos tridimensionales pero hay que establecer las relaciones que existen entre ellos. En otras palabras, se debe determinar internamente que una viga está conectada a una columna, que la columna está conectada a una fundación y que esos elementos dependen entre sí de diferentes formas. Si no existen esas relaciones, si lo que tenemos es simplemente una colección de bloquecitos de colores en pantalla que aparentan ser un edificio, pues no tendremos un proceso o un modelo BIM. De esta manera, al desplazar la columna, el modelo no entenderá que dicho desplazamiento afecta al modelo en su conjunto. Asimismo, se desprende que tampoco son BIM aquellos dibujos planos que tengamos que superponer manualmente para dar un entendimiento de la tercera dimensión ya que los mismos carecerían totalmente de conexiones internas.

A su vez, existen otros procesos tales como el BIM 2D, 3D, 4D, 5D y 6D sobre los cuales cabe decir que mientras aumenta la versión, se va integrando información adicional al análisis, información que se irá enlazando con el modelo principal de tal forma que permitirá estudiar la reacción de ciertos parámetros ante modificaciones en otros.

Finalmente, cabe mencionar que a los dos componentes mencionados, habría que agregarle un tercer componente muy importante: Forma colaborativa de trabajar. Detección de colisiones.

Las aplicaciones BIM imitan el proceso real de la construcción. Es un método multidimensional que abarca todas las fases del ciclo de vida de la obra constructiva. Se trata de una metodología de trabajo colaborativa entre proyectistas, constructores y demás agentes implicados en un proceso constructivo. Ello ayuda a detectar con la anticipación suficiente durante la etapa constructiva, posibles colisiones entre los distintos ítems del proyecto.

De esta manera, y retomando la pregunta que da lugar al título, podemos decir que BIM es un proceso que considera tres componentes: la información de partida, el modelo y las interacciones entre sus partes, y la forma colaborativa de trabajo. El resultado final del proceso dependerá fuertemente de las hipótesis planteadas para cada uno de los componentes.